Renuncias en el gabinete de Chiapas

El plazo vence el próximo domingo. Por eso los funcionarios que desean contender por una diputación local o presidencia municipal se han retirado de sus encargos públicos.

El caso más llamativo es de Eduardo Ramírez Aguilar quien ocupará una diputación plurinominal y dirigirá seguramente el Congreso del Estado y el Partido Verde Ecologista en el estado.

Desde el Congreso, el exsecretario de Gobierno defenderá los intereses de Manuel Velasco Coello e intentará construir su candidatura al gobierno estatal. Tendrá muchos recursos, como el que hasta el momento ha manejado Fernando Castellanos Cal y Mayor en la promoción de su imagen.

Bayardo Robles Riqué renunció a la Secretaría de Infraestructura para buscar, dijo, la candidatura a la presidencia municipal de Tuxtla Gutiérrez, pero de no conseguirla, regresaría al Congreso del Estado como diputado.

Carlos Penagos Vargas, secretario de la Juventud y Deporte; Fidel Álvarez, subsecretario de ese instituto, y Alfredo Araujo, director de SMAPA, que deberían ser castigados por delinquir con la promoción de su imagen, serán premiados con diputaciones. Por lo pronto, presentaron también su renuncia.

A la lista se suma Mauricio Cordero Rodríguez, de Desarrollo Social, y Mariano Díaz Ochoa, subsecretario de gobierno, así como los regidores por Tuxtla, Mario Eduardo de León Castillejos, María Alegría Sánchez, Marcos Valanci Buzali y Rita Guadalupe Balboa Cuesta.

Estas renuncias obligan a la reconfiguración del gabinete de un gobierno que hasta el momento no ha sabido responder a las necesidades ciudadanas, en un Chiapas con un 74.5 por ciento de pobres.

Ciudadanos con necesidades tan apremiantes son obligados a subastar su voto. Por eso no será raro que todos los personajes mencionados ocupen un puesto de elección y que el partido Verde se lleve carro completo, tanto en las elecciones federales como estatales.