Forzados, presuntamente por grupos criminales, habitantes de Jaltenango exigen salida del Ejército Mexicano de su municipio
Alrededor de mil personas de al menos cinco comunidades del municipio de Ángel Albino Corzo (mejor conocido como Jaltenango de La Paz), instalaron dos bloqueos en los principales accesos de esa cabecera municipal; esto para exigir la salida del Ejército Mexicano que se mantienen en esa localidad.
Desde la noche del jueves empezó la movilización de personas a la cabecera municipal, sin embargo, fue durante la madrugada de este viernes que arribaron decenas de camionetas con habitantes a bordo, provenientes de diversas comunidades de la Sierra, para instalar los bloqueos.
El primer punto interrumpido al tránsito se localiza sobre la carretera que conduce a San Nicolás, mientras que el segundo se ubica sobre la caseta de la policía estatal en la entrada a la cabecera municipal, donde hasta ahora permanecen activos.
Alrededor del mediodía, cientos de pobladores se concentraron en el parque central para luego marchar todos juntos hacia el lugar donde se mantienen acuartelados a los militares; ahí, los líderes del grupo les pidieron retirarse de esa cabecera municipal.
La situación se puso tensa, pero ninguna de las partes perdió el control de la crisis en el diálogo que sostuvieron.
Los militares se mantienen en Estado de Alerta, pues este bloqueo y las acciones de protesta de las y los pobladores que empezó desde el viernes, se tiene previsto que persista hasta el domingo. Esto ha paralizado todo el comercio, el transporte publico y cualquiera otra labor rutinaria de los los habitantes de la cabecera municipal.
A través de una denuncia ciudadana, los pobladores de la comunidad Ignacio Zaragoza clamaron ayuda al gobierno Federal y Estatal, debido a que “el Cartel Jalisco Nueva Generación con su célula Cartel de Chiapas y Guatemala, están obligando a los pobladores a realizar bloqueos en diferentes puntos, y a quien no vaya lo amenazan con golpearlo”.
Por la mañana, dos de las autoridades ejidales dialogaron con los elementos del Ejército, donde solicitaron el retiro de los uniformados hacia otra zona de la cabecera municipal; asimismo, advirtieron que la interrupción de la vialidad será por tres días.
Ante estos hechos. las clases en los diferentes niveles educativos se suspendieron y los comercios no abrieron sus puertas, en tanto que la población se mantuvo aislada en sus domicilios.
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