Pobres almas en desgracia
Esta es la primera vez que asisto con una ensalmadora y he tomado cuatro camiones. Lo que en el DF es un trayecto cotidiano en Campeche es un exceso. Debo reconocer que dos fueron porque nos equivocamos de ruta. Lucy, una amiga dispuesta a dar consejos que ella misma no aplicaría, me dice que ésta era una buena oportunidad para cambiar mi suerte. En alguna época de su vida lo había probado y para su sorpresa los remedios esotéricos le habían funcionado. Como si se tratara de una dieta, el fracaso de su voluntad la había conducido al camino de […]











