La magia en las blusas de Aguacatenango

Blusas plisadas tradicionales de aguacatenango

En la técnica del trabajo de las blusas de aguacatenango se utilizan de 3 a 4 tipos de bordados: rococó, bordado de relleno, punto o nudo francés y punto cadeneta.

Por Brissia Cruz

Roberto Marina, empresario y fundador de “Jtotic Marina”, trabaja en el diseño, venta y promoción de prendas artesanales en colaboración con líderes artesanas de comunidades indígenas en Chiapas; entre las prendas que producen, destacan las blusas de aguacatenango.

El joven empresario señala que lo que caracteriza a estas blusas artesanales de otras, es la presencia de plisados especiales: en la parte del pecho y en la parte de los puños; además, a diferencia de otras blusas bordadas, éstas cuentan con un tipo de unión en forma de trenzado.

“Este trenzado se hace con hilo y aguja, entonces la tela queda separada por una trencita, no es como unir telas con máquina pues se distingue la separación de la tela” expresa.

Marina menciona que dentro de esta categoría se clasifican cuatro tipos de blusas.

“La primera es la ‘blusa plisada tradicional’ que es la que tiene el vuelo como de huipil; el segundo viene siendo como una blusa tres cuartos manga larga; el tercero se llama ‘chaleco’, que es el de los más antiguos; la mayoría de todos ellos se hace con manta excepto por el ‘traje o la blusa tradicional’ esta última se hace de chifón” manifiesta.

Además, el artista aclara que la blusa tradicional es una blusa exclusiva para la comunidad; por ende, la técnica no suele colocarse en blusas comerciales a menos que el cliente en su momento las llegue a necesitar o tenga la posibilidad de pagarla.

“para empezar no son nada baratas y este tipos de blusas solamente se hacen para los días de feria o para las mismas mujeres de la comunidad o eventos especiales” agrega.

Cabe mencionar que, la falda típica también puede llegar a ser comercial, sólo que por su proceso de creación (se plancha tablón por tablón y cada tablón mide medio centímetro aproximadamente y utilizan de 4 a 6 metros de tela para hacer una sola falda) tiende a ser costosa.

Falda de aguacatenango con plisado tradicional

Jtotic Marina, es una iniciativa emprendida por Roberto Marina, misma que surgió a partir de la convocatoria: Jóvenes Creativos Chiapanecos, un proyecto organizado por el Fondo de Fomento Económico (Fofoe).

“Yo ya venía trabajando con esto desde la universidad pero no había podido completarlo por una cuestión de financiamiento, gracias a Fofoe mi proyecto se pudo materializar” expone.

Para el pleno desarrollo del proyecto, el joven emprendedor se trasladó a distintas comunidades de los Altos de Chiapas con el objetivo de conseguir artesanos que quisieran trabajar bajo sus diseños.

De esta manera, Roberto Marina contribuye con los pueblos de: San Juan Chamula, San Andrés Larráinzar, Aguacatenango, Chenalhó, Pantelhó, Zinacantán y Oxchuc; en cada municipio hay una mujer que lidera a cada grupo; por lo general los grupos están conformados de 7 a 10 artesanos, a veces pueden llegar a ser más pero depende de la cantidad de trabajo que soliciten los clientes.

“Mi mamá es modista de alta costura y… pues como ya tenía conocimiento de eso, decido estudiar mercadotecnia y publicidad con la idea de emprender un negocio; los primeros años fueron básicamente para aprender la función del bordado y el tejido, porque son diferentes técnicas en cada municipio, hay telar de cintura, telar de pedal y bordado sobre telas” menciona.

Roberto Marina incita a la población a apoyar la economía local y el trabajo artesanal de las comunidades, al mismo tiempo sugiere no “regatear” el costo de las prendas; sino por el contrario, invita a que los chiapanecos sean impulsores de la moda tradicional.

“así como a veces pagamos 300 o 400 pesos por un producto industrial, no debemos considerar que un producto artesanal no puede llegar a valerlo” pronuncia.

Artesanas de la comunidad de Aguacatenango