Artículos publicados por: Héctor Cortés Mandujano

Ilustración: Manuel Velázquez

JULION, un nuevo movimiento social

De ida, cerca de Chilón, cinco enmachetados ocupan la carretera con grandes troncos. Que están limpiando las orillas, dicen. Que no podemos pasar si no les pagamos 20 pesos. Lupita, una amiga que va con nosotros, propone: “Sólo traigo diez”. Ah, bueno, contesta el enmachetado número uno, que recibe la moneda y nos da un boletito

Ilustración: Manuel Velázquez

¿Demasiada felicidad?

Henning Mankell: «He oído hablar de un niño de cuatro años que intentó sacarse los ojos porque le tenía un miedo atroz a su padre».

Ilustración: Manuel Cunjamá

Hay sombras que secan nopaleras

W. Allen: «Nací en el judaísmo, pero me convertí al narcisismo».

Ilustración: Nadia Carolina Cortés Vázquez

Cadáveres vivos

Sales Heredia: Para tomar un órgano de un cuerpo y usarlo de trasplante, el enfermo ultracomatoso debe estar vivo científicamente, pero muerto legalmente; debe ser un “cadáver vivo”

Ilustración: Manuel Cunjamá

Algunos muertos

Fadanelli: “La juventud y la vejez son un golpe de suerte, no poseen valor en sí mismas. ¿Qué más da atrasar el reloj que adelantarlo?”

Ilustración: Manuel Cunjamá

Cargar la reata

Truman Capote escribió A sangre fría (reportaje literario o novela de no ficción, como la llamó, sobre un crimen en Kansas, en 1966); luego, en copias con talento, repitiendo el hallazgo y adaptándolo a otros crímenes de sus países, García Márquez escribió, en 1981, Crónica de una muerte anunciada, y Vicente Leñero, en 1997, Asesinato.

Ilustración: Manuel Cunjamá

Molière: la risa, la ironía, la burla

La sirvienta les dice que un lacayo pregunta por ellas. Madelón le explica que debe hablar con elegancia y decir: “Ahí está un imprescindible que pregunta si os encontráis en adecuación de estar visibles”

Ilustración: HCM

Película china

Gus van Sant: “Morir es fácil. Lo complicado es el amor”.

Ilustración: Manuel Velázquez

El corazón, las bendiciones

Pessoa: “Las ideas que se piensan válidas, también es porque se las siente. Nada vive en este mundo –ni la más abstracta de las ideas– si no está anidado en el corazón”.