Coetzee
Tierras de poniente (Mondadori, 2009), de J. M. Coetzee, fue la primera novela que publicó, en 1974, este escritor que en 2003 ganaría el Premio Nobel de Literatura.
Tierras de poniente (Mondadori, 2009), de J. M. Coetzee, fue la primera novela que publicó, en 1974, este escritor que en 2003 ganaría el Premio Nobel de Literatura.
Omar Cabezas parece chiapaneco, decía, porque también para decir que algo es muy bueno o muy malo, tremendo o maravilloso, lo adjetiva con la palabra más usada en Chiapas. Si Octavio Paz hubiera escrito El laberinto de la soledad en nuestro estado no hubiera hablado de la chingada, sino de la verga. Morían de hambre, mataron un mono (p. 98) “y nos dimos una comida de mono búfala… no jodás… de a verga…”
Chéjov: “Nos hemos acostumbrado a vivir con las esperanzas puestas en el buen tiempo, en la cosecha, en una buena aventura amorosa, con la esperanza de hacernos ricos o de que nos den el cargo de policía, pero las esperanzas de ser más inteligente yo no las noto en la gente”.
Sabato: “Qué misterioso es el mundo. Solamente la gente superficial no lo ve. Conversás con el vigilante de la esquina, le hacés tomar confianza y al rato descubrís que él también es un misterio”.
“La ley no es la ley, sino el poder; este axioma está escrito por encima de los valles en los cuales perecemos. Nada es lo que parece ser en este mundo, todo es mentira. Cuando decimos ley, queremos decir poder; cuando pronunciamos la palabra poder, pensamos en la riqueza, y cuando la palabra riqueza aflora a nuestros labios, esperamos disfrutar de los vicios del mundo”.
Beatriz Ladrón de Guevara reseña el documental The Act Of Killing (2012), del director y productor estadounidense Joshua Oppenheimer y anota este dato escalofriante (p. 62): “La realidad es que cerca de un millón de personas murieron en Indonesia entre 1965 y 1966 y han quedado en el olvido”.
Las novelas de Emilio Rabasa son un excelente material de lectura. Los años no las han envejecido y gozan de cabal salud. Son muestras, también, de que alguna vez tuvimos en Chiapas a un gobernador culto.