Normalistas de Chiapas exigen la aparición con vida de sus 43 compañeros, demandan renuncia de Aguirre y Peña

Estudiantes normalistas marchan en Tuxtla para exigir la aparición con vida de 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero. Foto: Isaín Mandujano

Estudiantes normalistas marchan en Tuxtla para exigir la aparición con vida de 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero. Foto: Isaín Mandujano

Un millar de estudiantes normalistas en Chiapas salieron a las calles para protestar por la desaparición de sus compañeros normalistas de Ayotzinapa en Iguala, Guerrero, por lo que demandaron la renuncia del gobernador Ángel Aguirre Rivero y del presidente Enrique Peña Nieto, a quienes responsabilizaron de encubrir crímenes de lesa humanidad.

Unos 200 jóvenes entre hombres y mujeres de la Escuela Normal Rural Mactumatzá, adheridos a la Federación de Estudiantes Campesinos Sociales de México (FECSM), la misma red a la que pertenece la Escuela Normal Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, encabezaron la movilización en la que participaron otras escuelas normales y hasta labriegos de la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ-Chiapas).

Marchan normalistas en Tuxtla. Foto: Isaín Mandujano

Marchan normalistas en Tuxtla. Foto: Isaín Mandujano

Detrás de los 200 normalistas chiapanecos, pues otro tanto igual se encuentran de apoyo en el estado de Guerrero, iban unas 800 estudiantes de otras escuelas normales que se manifestaron en total apoyo para exigir la aparición con vida de los desaparecidos.

Los normalistas exigieron las pruebas de ADN a todos y cada uno de los cuerpos que han sido sacados de las diferentes fosas clandestinas para certificar si son o no los estudiantes normalistas de Ayotzinapa.

Demandaron se deje de hostigar judicialmente a los estudiantes y padres de familia que perdieron a sus hijos, pues ya suficiente tienen con el agravio que han sufrido como para tener que enfrentar el engorroso y fastidioso trámite judicial burocrático.

Los normalistas, en voz de los oradores, llamaron a los chiapanecos a alzar la voz en contra de este agravio y que dejen de ser sólo espectadores de lo que sucede en Chiapas y el resto del país.

“La gente sólo nos ve y sigue sus pasos, no se detiene a preguntar, a indagar, sólo hemos tenido de ellos desprecio, sólo hemos tenido indiferencia, y en el peor de los casos nos señalan de revoltosos, de vandalos sólo por exigir nuestro derecho a una edudación pública, gratuita y de calidad”, dijo otra joven en el altavoz.

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