A nueve años de la Ley y Cero Transparencia
Por Eliseo Marín
El IAIP Chiapas no cumple con garantizar la ley que garantiza el acceso a la información.
El Instituto de Acceso a la Información Pública del Estado de Chiapas (IAIP Chiapas) celebra hoy el 9 aniversario de la publicación de la Ley que Garantiza la Transparencia y el Derecho a la Información Pública para el Estado de Chiapas, misma que lo erige y garantiza sus sueldos y salarios, mientras que la ciudadanía informada, exige se inicie un verdadero trabajo entre gobernantes y gobernados, que garantice la transparencia, el acceso a la información pública y el combate a la corrupción, sin actores sumisos y subordinados a órdenes de las autoridades gubernamentales.
Hoy la corrupción y la falta de aplicación del estado de derecho, son escenarios intolerables para cualquier persona, por eso es necesario que los actores políticos, de los tres niveles de gobierno y de todos las aristas institucionales se comprometan con la transparencia, la cual es una herramienta que puede inhibir el crecimiento de la corrupción y puede socializar la cultura del derecho.
A nueve años de la aparición de la Ley que Garantiza la Transparencia en Chiapas, precisamente hoy, se experimentan el menor índice de cumplimiento de la ley y aquí algunos números:
- La que se dice Consejera Presidenta del IAIP Chiapas, ha violado la ley que debería salvaguardar, al abandonar sus actividades en el Instituto y dedicarse 5 meses ininterrumpidos a realizar actos de campaña y partidistas. (a).
- En nueve años el IAIP Chiapas no ha notificado a ningún órgano de control interno el incumplimiento a las obligaciones de la mencionada Ley, en otras palabras, no garantiza el cumplimiento de la Ley (b).
- El IAIP Chiapas no sabe a quienes debe vigilar, pues sólo lista a las Poderes del Estado, Ayuntamientos, Órganos Autónomos, Partidos políticos y omite a los sindicatos, fondos y fideicomisos, Personas físicas y morales (c).
- A solo menos del 08% de los sujetos obligados (24 de los más de 300 S.O.) se les puede dirigir una solicitud de acceso a la información vía Infomex Chiapas (d).
- El IAIP Chiapas se ha dedicado a firmar convenios de colaboración, en lugar de exigir el cumplimiento de la Ley (e).
- Los sujetos obligados que incumplen con la responsabilidad de responder las solicitudes de acceso a la información no son sancionados.
- Solo menos del 04% de los sujetos obligados (10 de los más de 300 S.O.) cuentan con un portal de transparencia actualizado y apegado a los criterios emitidos por la autoridad. (f)
- El IAIP Chiapas solamente hace difusión a niños que en nada les interesa la información que el gobierno les puede brindar. No difunde el derecho a empresarios, investigadores o asociaciones civiles (g).
- Menos del 01% de los sujetos obligados cumplen con la obligación de contar con reglamentos de acceso a la información (h).
- En el sistema Infomex no se pueden ejercer los derechos para la protección de datos personales (i).
En fin, en nueve años de existencia el IAIP Chiapas se ha dedicado al turismo transparente, a tomarse fotos de firmas de convenios, a contar cuentos a los niños y a ser cómplice de la corrupción en el Estado.
Señor Gobernador y Señores Diputados: ¿Se garantizará algún día el Acceso a la Información en Chiapas?, ¿Están preparando las nuevas leyes que en verdad combatan la corrupción?, ¿Actuarán contra los funcionarios que sólo devengan el presupuesto sin cumplir con su deber? ¿Para cuándo contaremos con la nueva Ley de Transparencia y un verdadero Órgano Garante de la misma?
En uno de los enlaces que comparte el autor aquí, encuentro –sin querer pero imaginando lo peor como es lo prudente tratándose del «servicio público» (perdón por la exageración, es que así se llama)– una entrada con el título: «IAIP firma Convenio con Tuxtla y Mover a Chiapas» (es éste: http://iaipchiapas.org.mx/articulo.php?id=43).
Hasta ahí ya suena bastante ridículo. Pero en Chiapas uno ya sabe que tratándose de funcionarios, las ridiculeces pecan de ambición: son portentosas, visionarias, y pueden siempre llegar más lejos. En fin, que al leer un poco más, uno se entera de que la responsable de vigilar a los organismos y servidores públicos (sic) del estado va por la vida con una pluma Bic en alto firmando convenios, para ver si alguien –por diosito santo, por compasión, por lo que quieran, gusten y manden Sus Majestades– se anima por fin a cumplir la ley. La ley, por cierto, le da a la misma disfuncional funcionaria no sólo poder suficiente, sino la obligación de hacer eso mismo, pero sin necesidad de firmar absolutamente ni ma… nada, pues.
El problema es que si la susodicha –o cualquiera otro para el caso– cumpliera con su deber, no sólo no habría lugar para las dudas, sino tampoco para la demagogia.
«Por su parte, el presidente municipal de Tuxtla Gutiérrez, (sic) indicó que con esta firma se están dando (sac) formalidad a la decisión de poner la acción de gobierno en manos de los ciudadanos. Indicó (sic) que Tuxtla Gutiérrez será el gobierno más vigilado en la historia, ya que se expondrá a los ojos y al escrutinio de todos los tuxtlecos las acciones que se realicen (soc, soc, soc, soc, soc…)».
Y sería una pena desperdiciar tan emotivas palabras, ¿no? Además, tan bonitas que quedan las fotos, chingá.
En uno de los enlaces que comparte el autor aquí, encuentro –sin querer pero imaginando lo peor como es lo prudente tratándose del «servicio público» (perdón por la exageración, es que así se llama)– una entrada con el título: «IAIP firma Convenio con Tuxtla y Mover a Chiapas» (es éste: http://iaipchiapas.org.mx/articulo.php?id=43).
Hasta ahí ya suena bastante ridículo. Pero en Chiapas uno ya sabe que tratándose de funcionarios, las ridiculeces pecan de ambición: son portentosas, visionarias, y pueden siempre llegar más lejos. En fin, que al leer un poco más, uno se entera de que la responsable de vigilar a los organismos y servidores públicos (sic) del estado va por la vida con una pluma Bic en alto firmando convenios, para ver si alguien –por diosito santo, por compasión, por lo que quieran, gusten y manden Sus Majestades– se anima por fin a cumplir la ley. La ley, por cierto, le da a la misma disfuncional funcionaria no sólo poder suficiente, sino la obligación de hacer eso mismo, pero sin necesidad de firmar absolutamente ni ma… nada, pues.
El problema es que si la susodicha –o cualquiera otro para el caso– cumpliera con su deber, no sólo no habría lugar para las dudas, sino tampoco para la demagogia:
«Por su parte, el presidente municipal de Tuxtla Gutiérrez, (sic) indicó que con esta firma se están dando (sac) formalidad a la decisión de poner la acción de gobierno en manos de los ciudadanos. Indicó (sic) que Tuxtla Gutiérrez será el gobierno más vigilado en la historia, ya que se expondrá a los ojos y al escrutinio de todos los tuxtlecos las acciones que se realicen (soc, soc, soc, soc, soc…)».
…y sería una pena desperdiciar tan emotivas palabras, ¿no?
Además, tan bonitas que quedan las fotos, chingá.