Escrutinio Público

Obra de Manuel Velázquez.

Leer en la hamaca

En Yajalón, mi compadre Jorge Arturo, amabilísimo anfitrión, ha dispuesto una hamaca para mí en una terraza desde donde puedo ver enfrente las bellas montañas que rodean el pueblo, llenas todavía de árboles (aunque ya se sembraron aquí y allá casas, cuyos frutos generalmente no son buenos para la tierra).

Persiguiendo

La Curva de Aprendizaje y el Principio de Peters en Chiapas: ¿Qué Llegó Primero?

Coraje, impotencia, hartazgo y un sinfín de calificativos más se han ganado algunas de nuestras autoridades. Son ya varias administraciones municipales, una estatal completa y lo que va de la actual que las calles de las principales ciudades se encuentran desechas y con un caos vial que cuando quiere arreglarse, parece que complican más las cosas.

Parvulitas

Colegio de Parvulitos

De la mano de mi padre, lo recuerdo bien, esa mañana por primera vez iba a la Escuela de Parvulitos, una institución absolutamente nueva en aquel lugar aislado y apacible (…) se inauguraba el primer kínder privado, con el apoyo de aquel presidente municipal afable y bonachón, precursor de la moderna agricultura en Los Cuxtepeques.

Obra de Manuel Velázquez, pintor chiapaneco

Llevar la vida

Aunque he leído varios libros de ficción y ensayística de Luis Villoro, Conferencia sobre la lluvia (Almadía, 2013) es la primera obra de teatro de este autor que disfruto (sólo ha escrito tres, se supone). En este monólogo (muy en la línea del Auto de fe, de Canetti, por el tema, y Sobre el daño que hace el tabaco, de Chéjov, por la forma) un bibliotecario da una conferencia que desvía constantemente al asunto que más le interesa: su vida.

Manifestación contra alcalde Acala. Foto: Archivo

Los dictadorzuelos provinciales de Chiapas, el caso de Dagoberto Santiago

Los dictadorzuelos provinciales de Chiapas, transfigurados en presidentes municipales, tienen sangre de galleros, apostadores y pistoleros. Se erigen y sostienen en la impunidad, la injusticia y el miedo. Son perros de rancho, que ladran, muerden y arrebatan. En la primavera y el verano son rabiosos y sordos al respeto y la tolerancia.