
¡¡¡Que se vaya la desgraciada!!!
Enrique Robles S. En 1974, cuando cursaba el primer año de la carrera en la Universidad Autónoma Metropolitana (Unidad Azcapotzalco), mi profesor de filosofía, un francés llamado Jacques Gabayet, que usaba el pelo largo, tenis y overoles de mezclilla, hasta el cansancio nos decía: “la televisión es la caja idiota, embrutece y no sirve para nada. Yo no dejo ni dejaré jamás a mis hijos ver televisión y tampoco comer gansitos, porque son productos del imperialismo Yanqui” En esos tiempos, recién desempacados de nuestro Pueblo Mágico, era muy fácil dejarse impresionar e imitar a nuestros profesores. En consecuencia, decidí no […]