
El Diego y otras cosas
Ni la elegancia del Kaiser Beckenbauer ni la contundencia de Cruyff obtuvieron lo que Maradona tuvo: un arraigo que conecta directamente con el pueblo, la relación del ídolo con la gente en niveles que sólo los argentinos lo asumen como parte, algo propio de su “nacionalismo” que comprenden y exportan y que alcanza matices sociológicos justificables. Su posible “sucesor”, otro 10, Messi se cuadra: “el Diego es eterno”. Ese el marca una especie de distancia, y al fin y a cabo, respeto hacia alguien. Es tercera persona cuidando no expresar solamente “Diego es”. Sino el. Es como decir: “Usted Diego […]