Algunas preguntas y consecuencias de la pandemia mundial (2)
Saturación informativa es un buen concepto para definir lo que los ciudadanos vivimos desde hace semanas respecto a la pandemia mundial causada por el Covid-19.
Saturación informativa es un buen concepto para definir lo que los ciudadanos vivimos desde hace semanas respecto a la pandemia mundial causada por el Covid-19.
Las cifras de fallecidos se han incrementado en el mundo tras varias semanas de pandemia mundial a causa del Covid-19, popularmente conocido como Coronavirus. Una tragedia para los afectados y, también, para los familiares que no pueden dar la última despedida a sus seres queridos.
Hace algunos días escribí sobre el miedo en relación al Coronavirus (Covid-19). Esa novedosa variante de virus de la gripe que se declaró en China y que se estaba extendiendo rápidamente por el mundo, a pesar de las drásticas medidas tomadas por el gobierno del gigante oriental
Como si se tratara de la historia cíclica expresada por Arnold J. Toynbee, aunque sin los resultados que el académico británico preveía, hoy la vieja Europa vuelve a mirarse en el espejo para hallar y reconocer el mal. Concepto, este último, unido a nuestra condición humana y que, por lo tanto, debe leerse desde códigos morales, y ello no significa un nexo obligatorio con algún tipo de credo religioso.
Como si la historia volviera a repetirse, desde hace varias semanas la mutación de un virus de la gripe bautizado como Coronavirus recuerda el pánico que desató en México la aparición de una variante de la influenza tipo A, llamada H1N1.
Las noticias sobre caravanas desde Centroamérica que se dirigen a la frontera mexicana parecen no acabarse, como tampoco lo hacen las distintas posiciones expuestas, desde las instituciones públicas y los actores de la sociedad civil, respecto al trato que deben recibir los emigrantes.
Mientras la geopolítica dirime los acontecimientos y pugnas entre Estados para dominar el mundo, el vivir ciudadano se debate en muchos otros conflictos. Aquellos que parecen ajenos a la “alta” política, pero que son los que definen nuestra cotidianidad.
El sábado 18 de enero busqué en Google alguna nota referida a la partida de este mundo de Agustín Baraibar Constantino, y no la encontré. Esas notas aparecerán en los próximos días, no lo dudo, puesto que desde que lo conocí encontré en él a una persona comprometida con su entorno, preocupada por mejorar el Chiapas en el que nació.
Abrazos de inicio de año y buenos deseos durante los primeros días de enero, se prolongan con frases retóricas destinadas a transmitir los mejores presagios para nuestros seres queridos, y personas allegadas, cada cambio de año gregoriano.