No cierren la librería del Fondo de Cultura Económica
Hace un año con una amiga pasamos por el FCE en una venta nocturna, a las 9.30 de la noche y estaba lleno; jóvenes en su mayoría comprando libros. Nos imaginamos en su supermercado, con bolsas y con esa inconfundible cara de quien ha hecho una buena compra.











