
La era de Messi y Ronaldo
Como en política, en el futbol no deberían importar las simpatías. Al menos en apariencia, porque antes de la cultura de masas -vía medios de comunicación- no era tan significativo. Actualmente, hay quienes sostienen sin dudar que en la parte de la venta de imagen e impacto de audiencias no hay de otra que vender “lo bonito” y la “buena onda” para apuntalar la calidad deportiva.